Por: Enrique Taboada
Se dice que los poetas son alcohólicos, si bien no es una afirmación del todo cierta, si es posible encontrar en la historia de la literatura grandes personajes con esta característica. Charles Bukowsky (1920-1994), no murió por el alcohol, aunque vivió permanentemente agarrado de la jarra. Un dato esencial que se debe saber de Bukowsky es que fue un poeta que rompió un poco con las reglas de la poesía, otorgándose el permiso para hablar de todo: putas, sexo, alcohol, así como la decadencia social por la que fue envuelta su época.
Beber es un rollo emocional. Te arroja fuera del estándar de la vida cotidiana, fuera de que todo sea lo mismo. te empuja de tu cuerpo y de tu mente y te lanza contra la pared. Tengo el presentimiento de que tomar es una forma de suicidio en la que se te permite regresar a la vida y comenzar desde cero al día siguiente. Es como suicidarte y renacer después. Creo que he vivido más de diez o quince mil vidas.
Charles Bukowsky
Los que creen seguir la vida del escritor piensan que escribía borracho, cosa cierta aunque se sabe que le era difícil escribir prosa en ese estado, sin embargo la poesía era otra cosa, el ritual: un par de cervezas, un puro y así nacían quince líneas grandiosas. Después más alcohol y más letras hasta la mañana siguiente, el 70 porciento del trabajo era malo pero había un poema.

Cuando tenía 22 entró a una escuela donde le dijeron que su poesía no valía, fue la primera y última vez que entró a clases de literatura. A la edad de 24 años uno de sus cuentos ganó el premio Story en 1944, un agente lo contacto para planear su futuro como escritor pero el desistió, y tomó carrera en la bebida durante 10 años, de bar en bar fue juntando historias, experiencias hasta que un buen día tomo la máquina de escribir.
Empecé a escribir no porque fuera muy bueno, si no porque los otros eran malos en ese momento
Charles Bukowsky
Se dice que el escritor es el forjador de su propia historia ¡Bukowsky nos lo recuerda! El escritor jamás vivirá de lo que escribe pero se divertirá en demasía, sería un error pensar que debemos volvernos alcohólicos para escribir mejor, cada quien tiene su ritual para que la pluma fluya, yo abro otra cerveza pero no para escribir si no para leer a Bukowsky.
Cómo ser un gran escritor
Charles Bukowsky
Tienes que tirarte a muchas mujeres
bellas mujeres,
y escribir unos pocos poemas de amor decentes
y no te preocupes por la edad
y los nuevos talentos.
Sólo toma más cerveza, más y más cerveza.
Anda al hipódromo por lo menos una vez
a la semana
y gana
si es posible.
Aprender a ganar es difícil,
cualquier pendejo puede ser un buen perdedor.
Y no olvides tu Brahms,
tu Bach y tu
cerveza.
No te exijas.
Duerme hasta el mediodía.
Evita las tarjetas de crédito
o pagar cualquier cosa en término.
Acuérdate de que no hay un pedazo de culo
en este mundo que valga más de 50 dólares
(en 1977).
Y si tienes capacidad de amar
ámate a ti mismo primero
pero siempre sé consciente de la posibilidad de
la total derrota
ya sea por buenas o malas razones.
Un sabor temprano de la muerte no es necesariamente
una mala cosa.
Quédate afuera de las iglesias y los bares y los museos
y como las arañas, sé
paciente, el tiempo es la cruz de todos.
Más
el exilio
la derrota
la traición
toda esa basura.
Quédate con la cerveza,
la cerveza es continua sangre.
Una amante continua.
Agarra una buena máquina de escribir
y mientras los pasos van y vienen
más allá de tu ventana
dale duro a esa cosa,
dale duro.
Haz de eso una pelea de peso pesado.
Haz como el toro en la primer embestida.
Y recuerda a los perros viejos,
que pelearon tan bien:
Hemingway, Celine, Dostoyevski, Hamsun.
Si crees que no se volvieron locos en habitaciones minúsculas
como te está pasando a ti ahora,
sin mujeres
sin comida
sin esperanza…
entonces no estás listo
toma más cerveza.
Hay tiempo.
Y si no hay,
está bien
igual.